Arrestan a un rapero en Arkansas por sus letras amenazantes
Reese Alexander Sullivan, un chaval de 20 años de Arkansas con sueños de convertirse en rapero, ha sido arrestado por supuestas amenazas en las letras de sus canciones.
Las acusaciones son graves: se dice que sus letras contenían amenazas de matar a niños, al presidente, a su abuela, a grupos raciales específicos e incluso de cometer agresiones sexuales y actos de terrorismo.
El FBI analizó nueve canciones de Sullivan después de recibir informes sobre sus letras violentas y perturbadoras. A pesar de la gravedad de las amenazas en su música, cuando registraron el apartamento de Sullivan, no encontraron armas ni explosivos.
El rapero de Arkansas que tuvo que justificar sus letras ante el FBI
Sullivan, por su parte, defiende su inocencia, afirmando que las canciones en cuestión fueron escritas y grabadas cuando tenía 17 años y que estaba «rapeando como un personaje ficticio humorístico cuando hizo el material». Asegura que «no ha abusado sexualmente de niños y no tiene la intención de cometer los actos violentos mencionados en su música».
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Los documentos judiciales no han revelado el nombre de rapero de Sullivan ni la plataforma donde subió su música, lo que ha dificultado la búsqueda de las canciones. El aspirante a rapero de Arkansas fue arrestado el 4 de noviembre y liberado bajo una fianza de 50.000 dólares. Está programado para comparecer ante el tribunal el 11 de diciembre y, mientras tanto, le han ordenado abstenerse de usar las redes sociales o hacer publicaciones en internet de cualquier naturaleza escrita, auditiva o visual.
Este caso, más allá de la inocencia o culpabilidad de Sullivan, abre un debate sobre los límites y la responsabilidad del arte. ¿Hasta dónde puede llegar la libertad de expresión en la música? ¿En qué punto las letras de una canción dejan de ser arte para convertirse en amenazas reales? Parece que estas preguntas tendrán que ser respondidas en el tribunal.
Otro que tiene problemas con la ley es Offset, que se enfrenta a una demanda por presunta agresión.