C. Tangana aprovecha la censura para dar un golpe sobre la mesa
C. Tangana ha sido el centro de la polémica este mes, no solo en la música, sino en todos los ámbitos, siendo noticia en telediarios, periódicos y revistas por todo el país. Damn, boy.
Y es que resulta que se abrió una campaña de recogida de firmas para pedir la anulación de un concierto previsto para el pasado 24 de agosto en Bilbao con motivo de la ‘Aste Nagusia’. La razón de esta campaña fue el contenido «machista» de las letras de sus canciones. Se acumularon 10.000 firmas en un día y finalmente el Ayuntamiento de Bilbao suspendió el concierto del rapero, sustituyéndolo por Pedro Capó.
C. Tangana responde con clase y estrategia
¿Y cómo ha respondido Puchito esta vez? Como siempre, sin darle gran importancia, pero dejando clara su posición. En las redes sociales, tanto Twitter como Instagram, colgó lo siguiente:
Las mujeres que me escuchan no son menos feministas que nadie. Son mujeres que eligen por sí mismas en qué roles de películas, canciones o novelas quieren identificarse. Hablo mucha mierda en mi música. Yo no hago discursos para educar a nadie. Piensa por ti mismo. Nos vemos el sábado en Bilbao.
Y para rematar su posición, el madrileño organizó dos conciertos gratuitos en Bilbao para el mismo día en que estaba planeado el original.
Por si hacía falta aclararlo, ha hecho sold out en ambos, y tardó menos de media hora en conseguirlo. Las 1.500 localidades de la sala Santana 27, ubicada en el barrio de Bolueta, se agotaron volando, demostrando una vez más la capacidad de El Madrileño para salirse -de una forma u otra- siempre con la suya.
«No quiero decir muchas cosas. Gracias por estar aquí… Y vamos a bailar», dijo a su público el rapero madrileño durante uno de los shows, sin hacer referencia a la polémica con el Ayuntamiento.
No es el primer artista al que han cancelado un concierto por polémicas relacionadas con sus letras en los últimos tiempos, y es que seguro que muchos recordarán episodios como la cancelación de los conciertos de Kidd Keo y Kaydy Cain el año pasado en Alcalá de Henares.
¿Hasta qué punto es legítima esta censura y dónde están los límites de la misma? El debate está más que abierto.
Death Row también ha acaparado muchos titulares por sus nuevos dueños.