El nuevo juguete sexual: un culo que hace twerk
Ya casi nada nos sorprende: si tenemos relojes que funcionan conectados a un smartphone, coches que prácticamente aparcan solos y, en fin, un número infinito de inventos que si enumeráramos aquí conformaría una lista interminable, ¿qué nos va a sorprender ya? En cualquier caso, los hay quien dicen que para estar a la última en esto de las nuevas tecnologías uno debe poner el ojo en dos campos: las guerras y el sexo, y evidentemente nosotros preferimos la segunda.
La plataforma Pornhub ya ha sacado al mercado su último juguete sexual: un culo robótico vibratorio que puede ir conectado a un cacharro de realidad virtual. El invento, que básicamente consiste en un culo de CyberSkin que se mueve imitando los mismos movimientos que podría hacer una bailarina de twerk (salvando las distancias), busca ser lo más realista posible, por lo cual se estudió minuciosamente el movimiento del culo de algunas expertas en la materia para recrear una sensación -física y visual- realmente sorprendente.
[do action=»video-youtube»]yHnhDd7HlSY[/do]
El Twerking Butt puede rondar los 1.000 dólares, está hecho con un material que auto-regula su temperatura hasta alcanzar la de un cuerpo normal y el usuario puede controlar las vibraciones a través de una aplicación para smartphone o un control remoto. La versión deluxe incluye además un set de realidad virtual, que permite disfrutar de «contenido adicional», pudiendo al usuario no sólo tocar sino también ver a través de unas gafas especiales.
No es la primera vez que Pornhub saca un juguete sexual. Hace tan solo unos meses la ‘wankband‘ salió a la luz, una pulsera que genera electricidad con los movimientos de la masturbación, y, por si esto fuera poco, creó su particular proyecto espacial bautizado ‘Sexploration‘, que consiste en filmar la primera sextape en el espacio.
Las innovaciones en el mundo del porno parecen avanzar más rápido que en otros campos, y por si a alguno de vosotros/as os interesa, podéis adquirir este culo twerkero por 500$ o la versión deluxe del aparato con gafas de realidad virtual y contenido exclusivo extra por una módica cifra que está entre los 800$ y los 1.000$. La mala noticia es, como suele pasar con muchas cosas, es que el susodicho «cacharro» sólo está disponible en Estados Unidos, de momento.