Eminem vende los ladrillos de la casa donde se crió… ¡Y hace Sold Out!
Hace ya 16 años desde que Eminem lanzó el ‘The Marshall Mathers LP‘. En ese momento, era su tercer álbum de estudio, a los 28 años. En 2013, el de Detroit nos regaló lo que sería la segunda parte del trabajo, una especie de secuela: ‘The Marshall Mathers LP 2‘. Los más fans de Shady, aquellos que en su momento se volvieron locos con 8 Millas (8 Mile), la película autobiográfica de Eminem, tal vez de alguna manera hayan asociado la portada de ambos trabajos a la vida del artista. Acertaron: lo que aparece como artwork de los álbumes es la casa donde vivió Marshall en su más tierna infancia, en su localidad natal, Detroit.
Como lo del merchandising es para mediocres y en pleno siglo XXI uno tiene que buscar recursos para poder alimentar a su público insaciable con nuevos productos de cualquier tipo, Slim Shady ha decidido poner a la venta ladrillos de lo que fue su casa hace ya más de veinte años. Hace ya tres años que la propiedad fue derribada, por lo visto por razones relacionadas con la seguridad, la estructura había quedado deteriorada tras un incendio. Como sea, Eminem guardó 700 de los ladrillos que configuraban el edificio, y ahora están todos a la venta. Cada uno va acompañado con un certificado de autenticidad, firmado a mano por Em, están numerados y llevan una placa en el lateral.
Por si fuera poco, para los más coleccionistas Shady ha puesto a la venta también un viejo cassette, una camiseta, y otros objetos sacados de su más tierna infancia y adolescencia. Parte de lo recaudado con la venta de estas piezas irá destinado a la Marshall Mathers Foundation, la fundación de Eminem dedicada a ayudar a jóvenes con problemas en su estado natal, Michigan. A través de ella se recauda y dona dinero a bancos de alimentos y grupos de jóvenes y hace donaciones junto a otras organizaciones como la Eight Mile Boulevard Association.
Si por casualidad estáis interesados en comprar una pequeña parte de la historia de Em, lo podéis hacer aquí . Lamentablemente, los ladrillos -que estaban a la venta por unos 300 €- ya se han agotado. Y es que, ¿quién no quiere tener un ladrillo de coleccionista en su casa?