Las diferencias entre iOS y Android a la hora de desarrollar una app

Vivimos en la edad dorada de la tecnología. Todos tenemos un smartphone y vivimos casi esclavizados a él, por lo que el mercado de la telefonía y todos sus relacionados se han convertido en una de las industrias más exitosas de nuestra sociedad actual. Dentro de este mundo, el desarrollo de apps ha ido mutando en un mercado gigante y fundamental, por lo que cada vez más personalidades -incluidas las del mundo del hip hop- han querido invertir en él.

El ejemplo más reciente es el de la app KIMOJI de Kim Kardashian, que por el módico precio de un euro te da acceso a decenas de emojis de la familia de celebrities más famosa del mundo para comunicarte con tus amigos. Otro ejemplo célebre es la app de T-Pain, que básicamente te permite, a través de filtros, sonar como si fueras él .

Pero, ¿te has preguntado alguna vez cómo se desarrolla una app móvil para que pueda ser usada en sistemas operativos tan distintos como iOS y Android? Para el usuario medio este seguramente parezca un proceso similar, pero esa idea está muy alejada de la realidad. Y no es de extrañar, puesto que hablamos de dos sistemas diferentes, cada uno con sus herramientas características y también sus propios secretos. Pero no te preocupas porque existen muchos profesionales que te pueden ayudar, en Yeeply desarrollan apps para móviles  y cuentan con una amplia experiencia. Te explicamos algunos detalles sobre el proceso a continuación.

Probablemente aquí encontremos la mayor diferencia entre los dos sistemas. Android usa Java, muy popular en todo el mundo y bastante sencillo para usuarios novatos, hecho así aposta ya que con su creación buscaban tener la mayor base de programadores posible. Por su parte, Apple usa Objective-C, un lenguaje más antiguo y complicado que Java, pero que resulta muy eficiente. No obstante, la compañía de la manzana mordida estrenó un segundo sistema llamado Swift hace un par de años, el cual goza de una gran reputación en la comunidad de programadores.

Aunque a simple vista pueda verse como un pequeño detalle sin importancia, el hecho de que Android cuente con la funcionalidad del botón ‘Atrás’ e iOS no, resulta crucial para los desarrolladores. Todo programador tiene que tener en cuenta este factor a la hora de empezar un proyecto: en Android tendrán que encontrar las opciones correctas que asignar a este botón con el objetivo de facilitar la navegación del usuario, mientras que en iOS tendrán que encontrar vías opcionales para no restar funciones a la aplicación.

El patrón de delegación (delegate) es el más usado en iOS a través del uso de protocolos delegados, mientras que en Android este patrón es representado como un adaptador (adapter). Plataformas diferentes, sí, aunque los conceptos resultan muy similares.

Y último, pero no menos importante…

Más allá de las diferencias técnicas que existen entre ambos sistemas operativos, un factor de suma importancia son los costes a la hora de desarrollar en cada uno de ellos. Unos costes que en realidad son bastante similares, aunque en iOS resultan ligeramente más caros. ¿La razón? Que los materiales necesarios a la hora de empezar son más costosos puesto que tienen que usarse productos oficiales de Apple, y que la oferta y demanda en iOS es menor a la que se encuentra en Android.

Estas son solo algunas de las diferencias más importantes, pero existen muchos detalles más a tener en cuenta. Si tienes alguna idea para una app que te pueda hacer millonario de la noche a la mañana, estos son algunos de los obstáculos que tendrás que afrontar.

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