Yung Miami defiende a Diddy con una sentida carta al juez

Yung Miami ha salido en defensa de Sean «Diddy» Combs en una carta dirigida al juez Arun Subramanian de Nueva York, justo antes de que el fundador de Bad Boy Records conozca su sentencia. Ver para creer, qué os vamos a contar.
En el documento, presentado este mismo lunes 22 de septiembre, la rapera deja claro que no puede hablar sobre los hechos ocurridos antes de conocer a Diddy, pero asegura que, en su experiencia personal, él «no es un peligro ni una amenaza para la comunidad».
¿Qué dice la carta que ha escrito Yung Miami al juez de Diddy?
Miami, cuyo nombre real es Caresha Brownlee, relata que conoció a Combs hace cuatro años y que durante tres de ellos mantuvieron una relación pública. Algo que, dicho sea de paso, ya sabía todo el mundo.
Según la artista, detrás de la imagen mediática, Diddy es «amoroso, genuino, solidario y siempre alentador». La carta forma parte de varios documentos presentados ante el tribunal para mostrar una faceta diferente del productor.
A continuación, la carta completa traducida al español:
Estimado/a Su Señoría,
Mi nombre es Caresha Brownlee. Soy madre, hija, hermana y artista hip hop que ha pasado muchos años bajo el ojo público. Quiero dejar claro que no puedo hablar ni defender nada que pueda haber sucedido antes de conocer a Sean Combs. No apruebo ninguna mala conducta. Solo puedo hablar desde mi experiencia personal y del hombre que he llegado a conocer durante los últimos cuatro años.
Durante tres de esos años, estuve en una relación pública con Sean, y durante ese tiempo fui testigo y llegué a conocer a una persona diferente de la que a menudo se retrata. Detrás de las cámaras, él era amoroso, genuino, solidario y siempre alentador. Me motivó, creyó en mí y me ayudó a crecer tanto personal como profesionalmente.
Escribo esta carta porque creo que es importante que el tribunal conozca el lado de Sean que no siempre se ve o se menciona: el hombre que se entrega a los demás, que da oportunidades, que lidera con el ejemplo y que ama profundamente.
Él me ayudó a formarme tanto profesional como personalmente. Creyó en mí, me impulsó a crecer y me enseñó a ser una mejor mujer de negocios. Me ayudó a encontrar el equilibrio entre perseguir mis sueños y estar presente para mi familia, porque eso es lo que él hacía: sin importar lo ocupado que estuviera, nunca se perdía las fiestas o los momentos especiales con su familia.
Uno de mis recuerdos más significativos fue cuando me llevó a mi primer Met Gala. No se trataba solo del evento, sino de lo que representaba. Sean siempre ha hecho una prioridad el abrir puertas a las personas negras, para asegurarse de que seamos vistos, escuchados y valorados en espacios de los que históricamente hemos sido excluidos. Aquella noche me recordó que pertenecemos a cada sala, en cada mesa y en cada conversación. Él constantemente me animó (y a tantos otros) a soñar en grande, a caminar con confianza y a nunca reducir quiénes somos para hacer que otros se sientan cómodos.
También me dio una voz, al brindarme una plataforma en su red para hablar por la cultura y conectar con la gente de una manera real y auténtica. Esa oportunidad cambió la dirección de mi carrera y me mostró el impacto que una sola persona puede tener cuando decide elevar a los demás.
Más allá de todo eso, lo he visto devolver a su comunidad una y otra vez. En 2022, alimentamos juntos a personas sin hogar en Acción de Gracias, pero ese fue solo un ejemplo. Hubo muchos momentos en los que él daba, en silencio, en privado, sin cámaras, porque su corazón realmente quería ayudar.
También lo he visto hacer un verdadero trabajo interior. Tomó la decisión en apuntarse al manejo de la ira, comenzar terapia y comprometerse con la sanación física. Eso requiere fuerza, humildad y autoconciencia. No lo hizo para aparentar, lo hizo porque quería crecer y convertirse en una mejor persona.
En mi experiencia personal, Sean no es un peligro ni una amenaza para la comunidad. Es un hombre de Dios, alguien que eleva, apoya e inspira a quienes lo rodean para que sean mejores mental, física y espiritualmente. Pero, más que nada, es un padre y sus hijos son quienes más lo admiran. Ellos lo necesitan. Su presencia, amor y guía son profundamente importantes en sus vidas.
Realmente creo que él pertenece a su hogar, con su familia, las personas que más significan para él y que continúan siendo su mayor fuente de propósito y fortaleza.
Juez… Ese es un buen hombre.
Gracias,
Caresha Brownlee
Diddy fue absuelto en julio de los cargos de conspiración de crimen organizado y tráfico sexual, aunque fue declarado culpable en dos cargos relacionados con prostitución.
Su equipo legal sostiene que una pena de 14 meses como máximo sería adecuada. La sentencia se dará a conocer en octubre, y cartas como la de Yung Miami buscan mostrar un lado más humano del artista frente al tribunal. Veremos si lo consiguen.
Quien también ha dado explicaciones pero muy distintas es Doja Cat sobre la portada de su nuevo álbum ‘VIE’.

