Las canciones esenciales para disfrutar de la leyenda de Prince

Aunque el mainstream lo ha relegado a una injusta segunda posición como leyenda musical tras Michael Jackson, lo cierto es que si juzgamos lo estrictamente musical (y olvidamos las estrategias de marketing), Prince y el mal llamado rey del pop andaban muy igualados en talento y genialidad alargados en el tiempo. Sus canciones así lo demuestran.

Hijo de padre y madre músicos, desde muy joven comenzó a tocar instrumentos a y a versionar a artistas como Jimi Hendrix o Earth, Wind & Fire, pasando a formar parte de varios grupos, uno de ellos compartiendo banda junto al mítico productor Terry Lewis.

Pero no fue hasta 1978 cuando debutó en solitario con el disco ‘For You’, componiendo todas las canciones y tocando todos los instrumentos del LP. Comenzaba la leyenda.

De ahí en adelante (casi) todo vino rodado para el artista de Minnesota. Compartiendo comúnmente status con Madonna, Jackson y otros iconos del pop, normalmente la imagen que se ha tenido de Prince como músico ha sido superior desde un punto de vista más conservador.

Prince es uno de los mayores artistas eclécticos de la historia y desde The Medizine hoy queremos acercarnos a su música seleccionando las canciones esenciales de un sinfín de posibilidades a destacar.

‘When Doves Cry’ (1984)

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Una canción de funky-pop con innumerables reescrituras y diversas producciones, hasta que quedó tal como el de Minneapolis la tenía en su cabeza.

El single más vendido del año en que salió es tan extraño en su letra como personal y desesperado. Magnífico en todas sus extensiones y lecturas.

‘Kiss’ (1986)

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En la segunda mitad de los ochenta, la imagen de Prince estaba tan por arriba (en lo musical) de sus competidores en el pop que casi podía hacer lo que quisiera.

Sexy, minimalista, pegadiza y maravillosa, como el falsete del artista.

‘Purple Rain’ (1984)

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Poco que decir de una de las obras maestras del multidisciplinar artista y una de las mejores baladas de todos los tiempos.

La canción original duraba más de diez minutos y es una genialidad igual o mejor que la que sonaba (y suena) en las radios. La prueba -otra más- del inconmensurable talento de Prince.

‘Sexy MF’ (1992)

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‘Sexy Motherfucker’ es el título original de la canción, que por razones obvias no pudo llamarse tal cual.

Influencias del mejor James Brown (y puede que de Curtis Mayfield) en una genialidad incluída en un vídeo de casi 9 minutos.

‘Cream’ (1991)

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Potente y sensual canción que fue uno de los mayores hits del artista.

Aquí conocida más que de sobra (aparte de por ser fantástica) por ser la sintonía de cabecera de un popular y longevo programa del corazón de TVE. Imposible dejar de mover la cabeza con la canción.

‘I Wanna Be Your Lover’ (1979)

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Un jovencísimo Prince demostraba (bebiendo del mejor soul y funk clásico) que haría historia con una canción de tempo rápida. Accesible, sensual y atemporal, una muestra encapsulada de todo el talento que el de Minneapolis.

Está claro que la carrera de Prince está plagada de canciones que han pasado a la historia. ¿Cuál de todas es tu favorita?