Cinco discos de rap imprescindibles de los 90s (3a parte)
Cuando publicamos el primer artículo de «Cinco discos de rap imprescindibles de los 90s» sabíamos que el listado sería largo y que a ese artículo le seguiría una segunda, tercera, cuarta y probablemente quinta parte. Y si nos ponemos quisquillosos podríamos hacer una lista con cien discos destacables de esa esa década en el género y la inmensa mayoría estarían entre el notable y el sobresaliente.
Y es que sumada a su explosión como género (y su aceptación mundial) se dio en aquella década una competición sana que elevó el nivel estratosféricamente en cuanto a rapeos, instrumentales y colaboraciones. Y es que aunque cada vez los clips musicales tenían más nivel (el rap empezaba a ser algo grande, muy grande) lo primordial era la calidad del LP, en contraste con lo que solemos ver actualmente en la música negra.
Debido a la rapidez que da Internet para nacer y morir las cosas, quizás en este momento todo está enfocado a ofrecer un producto que funcione en el aquí y el ahora (un par de singles llamativos con vídeos espectaculares) aceptando que dentro de tres años nadie se acordará.
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Con ‘Illmatic’ y muchos otros álbumes, estaba el escalafón tan alto que ni un nobel ni un artista con renombre podía sacar a la venta cualquier cosa y eso hizo que casi podías comprar un disco al azar y tenías pocas posibilidades de que no fuese bueno o muy bueno. También influía el hecho de un sonido un poco más lineal (con diferencias entre costas y zonas) basado en el sample, el bombo, la caja y la calidad de como se rapeaba y lo que se decía.
Empezando por lo musical y acabando por la estética (muy reivindicada luego), el hip hop de los 90s funcionaba por muchísimas cuestiones que podíamos analizar pero sobre todo por contener un mensaje y una imagen honesta que conectaba con millones de jóvenes de todo el mundo. Aún con sus exageraciones, sabías que te estaban contando historias reales y problemas sinceros que te llegaban adentro y no te soltaban jamás.
Y es que aunque a finales de la década todo empezó a cambiar (especialmente con Bad Boy Records), la inmensa mayoría de los rappers tenían un enfoque honesto que interconectaba y empatizaba casi como si se tratase de una religión con muchos otros de todo el globo.
Dicho eso, proseguimos con la tercera parte de los mejores discos de rap de la década de los noventa, sin órden concreto y sabiendo que vendrán más artículos a completar el listado
GZA – ‘Liquid Swords’ (1995)
Con la tranquilidad que les daba (a él y a su primo RZA) el saber que su música era ya completamente aceptada, ambos se pusieron a trabajar en el debut en solitario de GZA y el resultado no pudo ser mejor.
Con un sonido clásico Wu-Tang con ciertas variaciones, las instrumentales van como anillo al dedo a un GZA reflexivo que comparte micrófono con el resto del clan y algunos de los miembros de grupos satélites de la banda. Un álbum inmejorable (el propio artista no puso superarse a sí mismo), ideal para escuchar en el orden en que fue publicado y establecido sin ninguna duda como uno de los mejores discos de la historia del hip hop.
The Roots – ‘Things fall apart’ (1999)
Casi rozando la siguiente década y con un single (‘You got me’) junto a Erikah Baduh que fue un hit mundial, The Roots sacaban a la venta su mejor álbum y una pieza indispensable en la historia del género.
A pesar del éxito del single y de su relativa accesibilidad (aunque era y sigue siendo exquisita) el álbum era de todo menos comerial: rap inmejorable con samples, loops, rapeos fantásticos y buenos storytellings. Indispensable.
Dr. Dre – ‘2001’ (1999)
También casi en la siguiente década salió a la venta uno de los discos más completos y populares de todos los tiempos para el género. Single tras single, Dr. Dre se convertía (tras Michael Jackson en ‘Bad’) en el artista que más dinero había ganado en un año y dejaba su disco en el olimpo del hip hop tras el pequeño batacazo que supuso ‘The Aftermath’.
El álbum era limpio, gigantista, completo, con colaboraciones de todo el mundo (especialmente de la costa oeste) y supuso un proyecto tan trabajado y agotador para el ex miembro de NWA como exitoso. Un básico para los amantes del west coast.
Jeru The Damaja – ‘The Sun Rises In The East’ (1994)
Uno de los álbumes que mejor (y con más calidad) define al rap de la primera mitad de los noventa. Siendo el álbum de debut de Jeru The Damaja y considerado uno de los LP’s que ayudó a dar el empujón a la costa este en la escena, el disco está producido por DJ Premier en un estado de gracia que hace de éste un trabajo atemporal y absolutamente recomendable.
‘Come Clean’, ‘D. Original’ o ‘You Can’t StopThe Project’ son tres singles convertidos ya hoy en absolutos clásicos, aunque el LP entero es fantástico.
Gang Starr – ‘Moment Of Truth’ (1998)
Para muchos el mejor disco de Gang Starr (que no es decir cualquier cosa) y el summum de una carrera en que el fallecido Guru y DJ Premier nos ofrecieron maravilla tras maravilla en sus álbumes.
Aunque el single ‘You Know My Steez’ fue un hit mundial, el álbum trabajo es una obra de arte mayúscula en cada producción musical, cada rap de Guru, cada caja, cada bombo y cada scratch. Tiene todo lo que tiene que tener y no le falta de nada a un disco que aun a día de hoy sigue siendo un completo y objetivo orgasmo musical para nuestros oídos.
No sonó lo mejor de los 90s en nuestro primer programa de TheMedizineTV, pero sí se pasaron por allí H Roto y Love Y-i Valvanne. ¿No lo has visto aún?