Review de «Air», la película que narra la historia de las Air Jordan
Hace unos meses, cuando vimos el primer teaser trailer de «Air», nos dijimos a nosotros mismos dos cosas (al menos la mayoría): la primera, que cómo no se le había ocurrido a nadie antes la idea de contar como se creó la marca de zapatillas más conocida del mundo (o al menos la que tiene más valor añadido) y, la segunda, que queríamos que corriese el tiempo rápido hasta que llegase el estreno.
Dicho esto, quizás no hace falta aclarar que el aquí firmante correría a verla el mismo 5 de abril, día del estreno en cine del largometraje. Cierto es que las críticas profesionales de Estados Unidos ya venían diciendo que era una película maravillosa, pero siempre es mejor acudir a la sala con las expectativas bajas, por lo que pueda pasar.
¿Es «Air» tan buena como se dice? He aquí la review que buscabas
Dirigida por Ben Affleck, la cinta cuenta cómo el director de la línea de baloncesto de Nike, el director de marketing, el encargado de fichar a jugadores como imagen y el propio CEO de Nike (el mismísimo Phil Knight) ficharon a Michael Jordan con 18 años, le hicieron una línea de zapatillas y ropa deportiva y cambiaron para siempre la historia de la moda deportiva: desde el diseño de las zapatillas (por los que la NBA los sancionaba cada partido) al propio concepto de la propia línea.
Por supuesto, nada de esto será fácil: adidas y Converse tenían mucha mejor fama en la primera mitad de los ochenta, sus divisiones de baloncesto eran mucho más potentes y la credibilidad como marca que poseían eran muy superior. De ese modo, desde Nike solo pudieron ser más originales, más pioneros y más entusiastas para llevarse el gato al agua.
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Sin escupir más spoilers que los que todo el mundo conoce —al fin y al cabo, es una historia mil veces contada y documentada— estamos ante una película de negocios, de trabajo en equipo y de persecución de los sueños. Affleck dirige con maestría (pocas veces se dice lo bueno que es este tipo tras las cámaras) una película con un reparto sencillamente maravilloso e histórico: Matt Damon, el propio Affleck, Jason Bateman, Chris Tucker, Chris Messina, Marlon Wayans y una sensacional -como siempre- Viola Davis. La radiografía de los ochenta, la banda sonora y, básicamente, cada plano y cada línea de diálogo son magníficos.
Una historia multidimensional con tensión, con drama, con humor y con mucha humanidad. La fábula de cómo se creó la línea deportiva más buscada del mundo no pudo haberse contado mejor a ninguno de los niveles. Tanto, que podríamos estar enumerando sus virtudes -de manera innecesaria- durante muchos párrafos más.
Dicho esto, tan solo tienes que dejar de leer y correr al cine a verla. Sí, ya.
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