Roban 50 gigas de música y vídeos inéditos de Michael Jackson

A estas alturas, con el filtro del paso del tiempo haciendo su trabajo, queda claro que Michael Jackson es el músico más reconocido y respetado de todos los tiempos. Incluso a nivel de todas las artes, el talento creativo y su genio innovador es escalable a casi todas las categorías.

Sin embargo, ha sucedido un hecho que está dando la vuelta al mundo, como casi todo lo que sucede con respecto a su legado. El histórico ingeniero de sonido Brad Sundberg, que trabajó con Michael Jackson durante diferentes décadas, ha reconocido que le han robado más de cincuenta gigas de música inédita del que fuera llamado «rey del pop». Como lo leen.

El suceso ocurrió en Bruselas, donde Sundberg se encontraba dando una serie de clases magistrales. Mientras el ingeniero estaba enseñando sus técnicas como profesional del sonido de primerísimo nivel, alguien entró por una ventana y robó un ordenador que contenía estos 50 gigas de música que nadie había oído jamás.

Estas fueron las declaraciones de Sundberg al respecto en sus redes sociales :

Hoy ha sido un día realmente difícil, ya que fuimos víctimas de lo que parece ser un robo organizado de uno de mis ordenadores portátiles. Estamos trabajando con la policía de Bruselas y haciendo todo lo posible para recuperar el material. Gracias por todo el amor, amabilidad y apoyo. Nos vemos en el estudio.

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El material grabado incluye canciones nunca antes oídas, demos, versiones no terminadas e incluso vídeos inéditos de Jackson en el estudio. ‘Stranger in Moscow’, ‘Childhood’, ‘Dangerous’ o ‘Faces’ son algunas de las canciones cuyos extractos han sido robados.

Mientras tanto, un debate se ha generado en torno a los fans de Jackson. Por una parte, está si se deben consumir canciones sustraídas ilegalmente y subidas a las diferentes plataformas, por otro si Sundberg debe lucrarse en sus seminarios de pago mostrando una serie de material que pertenece también a los herederos del cantante, a sus albaceas y a Sony Music.

De cualquier modo, y como suele suceder con Michael Jackson incluso tras su muerte, la polémica está servida.