¿Cómo se cuentan las visitas en Spotify y en YouTube?
Nos encontramos en una época de la música en la que las visitas en plataformas como Spotify, YouTube o Apple Music son determinantes para los artistas de la industria de la música. Gran parte de la financiación de los proyectos proviene de estas reproducciones. Sin embargo, se sabe muy poco sobre cómo se cuentan este tipo de interacciones con los contenidos.
¿Cuándo se contabiliza una visita? ¿Tengo que ver el vídeo entero para sumar una reproducción al vídeo de YouTube que estoy viendo? ¿Si veo el vídeo dos veces, se cuentan dos visitas?
Si las visitas son la unidad de medida en la que usan las plataformas para repartir el dinero entre los creadores, lo lógico es que dichas plataformas dejasen claro los parámetros que se usan para contar una visita. Sin embargo, no ocurre así en todos los casos.
Streamings y visitas en Spotify y YouTube: ¿cómo se cuentan?
Spotify es la plataforma más clara a la hora de explicar cómo realizan el conteo. A raíz de la popularización del Spotify Wrapped -campaña que realizan en diciembre todos los años en la que muestran a los usuarios lo que más han escuchado-, la empresa expuso en su página web los requisitos para que una visita cuente como tal.
En Spotify es necesario que el usuario escuche la canción por más de 30 segundos para que la reproducción cuente como tal. En el caso de los álbumes, EP o mixtapes, se suman todas las reproducciones de cada una de las canciones que incluya. Es decir, si Travis Scott incluye ‘Escape Plan’ en ‘Utopia’, el disco ya comenzaría con las más de 77 millones de visitas que suma el tema. También se detalla que las reproducciones sin conexión se suman cuando el oyente se conecta a la red, lo que debe suceder, al menos, una vez al mes.
Por su parte, YouTube es mucho más hermética sobre el recuento de visitas y no ofrece información oficial al respecto, para que nadie utilice los parámetros a su favor. Así que toda la información que se tiene proviene de la experimentación. Según diversos experimentos como el realizado por Marketingaholic , la plataforma roja cuenta la visita alrededor de los 30 segundos.
Lo que sí varía son la forma de contar las repeticiones. Si ves un vídeo varias veces en un espacio inferior a la media hora, solo se contará una de las visitas, ya que detecta las cookies. Para conseguir que las visitas cuenten, deberíamos borrar las cookies después de cada visita.
Otro aspecto que castiga YouTube es el llamado autoplay. Esta práctica consiste en insertar el vídeo de alguna manera en otro portal y hacer que este se reproduzca de manera automática al cargar la página. Todas las visitas que se obtengan de esta manera, no serán contabilizadas.
Estafas en las visitas de YouTube y los streamings de Spotify y otras plataformas
¿Por qué plataformas como Youtube no son claras en algo como esto, que se supone que es su moneda de cambio, su fuente para medir el valor? Buscan que las visitas sean lo más orgánicas posibles, evitan que se elaboren diferentes estrategias que puedan aprovecharse de estos parámetros, como ha ocurrido en Spotify.
Son varios los casos de estafas. El más sonado dentro de Spotify es el de un desconocido -o varios- que crearon dos listas de reproducción , llamadas ‘Soulful Music’ y ‘ Music From The Heart’, que llegaron a alcanzar el trigésimoquinto puesto entre las playlists más escuchadas en el mundo.
El truco consistía en que estas listas tenían 467 canciones de unos 30 segundos -el mínimo para que Spotify cuente la visita- cuyos autores eran ficticios. A su vez, alguien tenía 1.200 cuentas Premium de la plataforma en Bulgaria con las que reproducía las listas una y otra vez.
Esto le costaba 12.000 euros al mes. Según Music Bussiness Insider, este movimiento le podía reportar unos 288.000$ al mes. Sin embargo, Spotify ya ha eliminado estas dos playlists y no hay rastro de nuestro amigo búlgaro en la plataforma.
No ha sido el único: en YouTube es habitual tratar el tema de la compra de visitas. Son numerosas las webs que ofrecen un número de reproducciones a cambio de una cantidad, basta con buscar los conceptos ‘comprar visitas Youtube’, para ver una gran cantidad de portales que ofrecen estos servicios.
De nuevo, el hermetismo con el que trabajan estas plataformas juega en contra de los artistas, que son los grandes perjudicados dentro de estas prácticas al no ver reconocido su trabajo y esfuerzo como merece.
Así que ya sabes, ¿cuánto rato tienes que ver un vídeo en YouTube o escuchar un tema en Spotify para que cuente la reproducción/visita? Como mínimo, 30 segundos. Suponemos que parte de la magia de todo esto es que no haya mucha información al respecto… O simplemente haya que encontrar la forma de desvelarla.
Los que no han necesitado comprar reproducciones son Snoop Dogg y Dr. Dre. ‘Still D.R.E.’ ha alcanzado los millones de reproducciones en Spotify.