Big Pun tiene por fin su propia calle en Nueva York
La historia de Big Pun es tan motivadora (y a su vez triste) que da para una película de éxito mundial. Un chaval del Bronx que tuvo que dormir temporalmente en la calle y que se agarró al rap como manera de cumplir sus sueños.
Unas metas que se cumplieron con creces: y es que, si atendemos a habilidades en el micro, Big Pun (cuyo nombre real era Christopher Ríos) es uno de los mejores rappers de todos los tiempos.
Pero todo tiene un precio en la vida, y a veces ese coste es psicológico. El trauma de tener que ser un vagabundo durante un tiempo fue algo que Pun no pudo soportar, al menos no mentalmente. Y es que, incluso convertido ya en una estrella mundial, el rapper seguía intentando combatir la ansiedad.
La calle que Big Pun se merecía ya es una realidad
Fue esa misma ansiedad la que le hizo obsesionarse con la comida. Es lo que tiene cuando vemos un lado de la fama, podemos envidiar a una persona por tener un talento increíble para el rap y por estar ganando bastante dinero y sin embargo ese admirado ser puede estar viviendo un calvario interior.
Es el caso exacto de Pun, que acabó muriendo con solo 29 años. El caso de Pun, y el de tantos otros por desgracia.
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Su repentino fallecimiento (debido a un infarto y a un fallo respiratorio) no hizo sino amplificar su leyenda y su legado. Una carrera con solo dos discos de estudio -y uno de ellos póstumo- y un montón de magníficas colaboraciones.
Sea como sea, lo cierto y lo claro es que Big Pun fue, es y será uno de los grandes referentes del popular barrio del Bronx , más aún para los habitantes latinos.
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Y parece que su legado y su recuerdo es tan importante que se le ha querido rendir homenaje de manera oficial, nombrando una esquina con su nombre en el barrio neoyorkino donde se crió. De ese modo, una serie de representantes oficiales del barrio y los seres más queridos del artista se citaban en la esquina de Fordham Road y Grand Concourse y la renombraban como «Big Pun Plaza».
Uno de los concejales de la ciudad (concretamente Fernando Cabrera, también de ascendencia latina) declaraba lo siguiente en el renombramiento:
«A pesar de su corta vida, Big Pun fue un tremendo contribuidor a la vibrante vida cultural del Bronx. Me siento orgulloso de recordar y honorar a Big Pun con el renombramiento de esta intersección»
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Pun era un artista magnífico cuya vida se terminó demasiado pronto. Y aunque su música vivirá para siempre, lo cierto es que este tipo de reconocimientos oficiales le hacen justicia a alguien que puso de nuevo el nombre del Bronx en todo el mundo. Sea donde sea, Pun estará sin duda sonriendo en este momento mientras ve a los suyos asistiendo a tal honor.