El juez deniega a Diddy gran parte de sus peticiones

Sean «Diddy» Combs ha pasado de ser la persona que más ha capitalizado (al menos en lo económico) el hip hop y la música urbana en el mundo, a estar en una prisión de Brooklyn a la espera de su juicio, que será presumiblemente el 5 de mayo de 2025.

Y parece que el magnate ha sufrido un nuevo revés en su lucha por la libertad, algo que cada vez (aunque hemos de ser prudentes) parece más lejano. El empresario y sus abogados estaban alegando que las declaraciones públicas de las supuestas víctimas y sus equipos legales podían interferir en que él tuviera un juicio justo, con pretensiones y peticiones claras de que no siguieran haciéndolo.

Vaya, que quería que las supuestas víctimas dejaran de hablar sobre el asunto.

Sin embargo, el juez del caso (cuyo nombre es Arun Subramanian) ha dejado claro que las supuestas víctimas y sus allegados pueden seguir contando su versión, del mismo modo que lo hacen los familiares o amigos del fundador de Bad Boy Records y Sean John.

El juez también ha dicho que esa orden de silencio que pide Diddy y su equipo solo se da de manera puntual y en muy pocas ocasiones, con lo que en este caso (por muy mediático que sea) no se va a aplicar.

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Por si no fuera suficiente, el juez Subramanian también ha rechazado las peticiones del equipo de Diddy de eliminar todos los posts de redes sociales (y prohibir los que vengan en el futuro) por parte de las supuestas víctimas de Combs.

Es por ello que se trata de un nuevo revés para el magnate de Harlem, que se suma a los problemas a la hora de vender su mansión de Beverly Hills, valorada en 61 millones de dólares, un dinero que podría ayudarle bastante mientras (suponemos) que tiene gran parte de sus cuentas paradas.