Kanye West tortura a Pete Davidson en el clip de ‘Eazy’ con The Game

Aunque la vida de Kanye West suele ser convulsa e imprevisible, los últimos meses lo han sido más aún. Su tormentoso divorcio de Kim Kardashian, su romance express con la actriz Julia Fox (de «Uncut Gems») y, especialmente, la relación de su ex mujer con el cómico Pete Davidson («Saturday Night Live») han podido con el productor, rapper, diseñador y empresario de la ciudad del viento.

Tanto es así que Ye comenzó una consecución de insultos, mofas y memes contra Davidson que culminaron con el cómico dejando Instagram. Aunque Davidson declaró que su decisión no tenía nada que ver con los actos de West, lo cierto es que la mayoría de gente piensa que ese bullying tiene mucho que ver con su alejamiento de las redes sociales.

Pues bien, aunque todo suene ya a excesivo y fuera de lugar, la cosa sigue por parte de Kanye West. De hecho, en el recién estrenado vídeo de la canción ‘Eazy’ junto a The Game, podemos ver a un Ye en stop-motion prendiendo fuego y decapitando a Pete Davidson. Como lo leen.

Como era de esperar, los medios de comunicación y las redes sociales (en su mayoría) han condenado la decisión creativa de West, ya que se trata de un gesto poco elegante, por usar un eufemismo. Hay que tener en cuenta la tremenda influencia que West ejerce sobre personas de todo el mundo, que pueden ser influenciables.

¡Suscríbete a The Medizine TV!

El polémico y llamativo vídeo de Ye coincidía con la declaración legal de soltería de Kim Kardashian. Aunque hace mucho que Kim solicitó el divorcio, la estrella del reality show más popular del mundo la recibió legalmente hace solo unos días, con lo que podría (si así lo desea) incluso casarse con Pete Davidson.

Aunque esta telenovela parece alargarse más de lo necesario, lo cierto es que aún quedan muchos capítulos en el fin de la relación entre el de ‘Late Registration’ y Kim K. Además, se trata de los más delicados: llegar a un acuerdo por la custodia de los cuatro hijos que tienen en común y ver cómo reparten las propiedades que compraron conjuntamente. Casi nada.